miércoles, abril 07, 2010

Ayer cumplí 4 años. No. Cumplimos años: Lina y yo, como padres, Andrés de vida.

Nunca antes me había sentido tan feliz. Tan orgulloso.

La vida no deja de sorprenderme, y Andrés desde que nació, no deja de llenarme de nuevas emociones.

Descubrir que es un individuo que es capaz de discutir, pelear y defenderse, sigue siendo sin duda una experiencia que me conmueve en cada una de sus palabras tan bien pronunciadas. Ser testigo de cómo se esfuerza para tener mejores y más sólidos argumentos, me vuelve loco.

Antes de que se vaya a su cama, se ha vuelto una costumbre luchar –cada vez más rudo- en mi cama. Casi siempre me toca ser el villano que tiene que ser vencido por el súper héroe. Brinca desde la cama, confiando en que lo voy a atrapar. Deja que lo aviente simulando que vuela, y me golpea –cada vez más fuerte- sin que yo oponga la mínima resistencia. Practica llaves de lucha en mi cuello indefenso, y puede dejarse caer sobre mi estómago para lograr que yo me rinda. Por lo general, como en todos los comics, los malos terminamos sucumbiendo ante los súper poderes de los buenos, pero al final, aún en contra de su voluntad, “el malo”, hecho pomada, lo manda a dormir a su cuarto.

Pero ya entrada la noche, en medio del silencio y la oscuridad, cuando sin ningún motivo aparente, aparece en nuestra cama, y se mete en nuestras sábanas, pretendiendo no ser descubierto, ¡me provoca tanta ternura! Más, cuando ya profundamente dormido, e inconcientemente termina poniendo su manita sobre mi pecho. Y ahí estamos, él vestido con su pijama de superman, y yo, conteniendo el llanto, conmovido, y las ganas de abrazarlo fuertemente para besarlo.

Andrés ayer cumplió 4 años. Y no encuentro ningún regalo que pueda compensar todos los regalos que me hace todos los días.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Wow Alex! Que palabras tan bonitas que dices de tu hijo! He experimentado tambien esos sentimientos y creo que es la cosa mas maravillosa que pueda existir. La razon de vivir! Besos y gracias por compartir. Elisa Coles