viernes, abril 13, 2007

Me había propuesto no volver a postear sobre temas que pudieran causar polémica o que, por su contenido, pudieran generar algún tipo de antipatía a mi persona, o prejuicio a mis limitadas formas de pensar.

Pero tantas coincidencias, me llamaron la atención y tanta información, desbordó de mi cabeza, y a falta de otro espacio donde pudiera escribir, traicionando a mi propia voluntad, decidí escribir de nuevo, mi opinión sobre la ley de depenalización del aborto en la Ciudad de México.

Primero, un amigo mío de la oficina, a quien particularmente respeto y admiro por la objetividad, claridad y precisión constante en sus ideas y comentarios, me abordó para platicarme que había estado leyendo este humilde espacio, y que, estaba interesado en plantear conmigo unas ideas que podían estar en sentido contrario a algunas que yo había publicado en posteos anteriores.

Quería hablar del post donde yo me pronunciaba a favor de la despenalización del aborto... y tan pronto me lo propuso, no tuve otro remedio que aceptar el debate, a pesar que sabía perfectamente que los dos, somos un reflejo de los dos grupos que ahora discuten ese mismo tema en la Asamblea y que aunque tenemos pocas diferencias, son irreconciliables.

En la sala "F", escuché cómo expuso sus convicciones. La mayoría de sus argumentos los había escuchado antes, pero uno en particular, me pareció muy interesante: "... no, no es un asunto religioso ni moral; es un asunto de 'elementales derechos humanos' donde la ley debe proteger a todos, particularmente a los más indefensos..." (uf!, Jaque!) Yo tenía bajo la manga, el antídoto, el criterio "bioético-científico" que, contrario al criterio católico, establece una diferencia entre "una célula fecundada", "un embrión" y "un feto", y que establece que las dos primeras fases de la gestación no se consieran "un ser humano", porque carece de características elementales como un sistema nervioso central completo, órganos desarrollados, un cerebro humano, entre otras muchas cosas. Aunque ese ser vivo tenga la potencialidad de convertirse en un ser humano, simplemente no lo es.

Lamentablemente, ni lo supe explicar correctamente en ese momento, y, es una visión que difícilmente será aceptada por quienes tienen muy arraigada la versión religiosa de que el "alma" de una persona está desde la fecundación, mientras que científicamente se ha acordado que la "psique" o "alma" de una persona requiere de un cuerpo humano desarrollado plenamente.

(¡Vaya embrollo!, ¿No?, Simplemente no me gustaría estar en los zapatos de ninguno de los asambleístas)

Después de esa interesante y civilizada charla, y después de haber echado a andar mi motor de la reflexión, que difícilmente puedo parar, seguí pensando en eso en el camino a casa, y, durante la cena, en el televisor, las noticias no dejan de hablar sobre el tema.

Un comercial, donde aparece Chespirito, y afirma que su madre tuvo la opción clara y propuesta por su doctor de abortarlo, y que ella no lo aceptó, y que gracias a esa decisión, hoy lo tenemos entre nosotros... (Mi cuate, me mencionó al menos dos personalidades mundiales que pudieron haber faltado si sus madres hubieran tomado la decisión del aborto).

Inmediatamente, mi retorcido -e irónico- motor, me hizo imaginar a qué personajes "del mal", pudieron haberse evitado si sus madres, hubieran abortado por no tener las condiciones de amor y educación para educar por el "buen camino" a sus hijitos...

Después, en un programa nocturno de televisión, "Contrapunto", conducido por Amparo Casar, trataron el mismísmo tema... (Mucha coincidencia, ¿No?). Apesar de mi enorme deuda de sueño, decidí quedarme para "documentarme".

En la primera parte del programa, entrevistó a una mujer que me pareció excepcional: Marta Lamas. Feminista, catedrática de la UNAM y del ITAM. La señora Lamas, con una mostrada sensibilidad, y con un perfil muy sobrio, científico, laico y humanista, expuso muchos puntos a favor de la ley de despenalización del aborto que me parecieron muy buenos (de ella, copié el argumento de que antes de que el producto sea feto, no es considerado ser humano)... por la avanzada hora de la noche, decidí no llamarle a mi cuate para que encendiera el televisor y me evitarla la molestia de repetir torpemente lo que mi volátil memoria recordara al día siguiente... el programa simplemente me quitó el sueño.

Sin embargo, en este momento, apenas a un par de horas de que el programa terminó, y que no he podido dejar de darle vueltas a las ideas en mi cabeza, decidí tomar la computadora y alcanzar a escribir las pocas ideas que pude retener... antes de perder definitivamente tanta información.

En primer lugar, aclaró lo que muchos ignoramos: "La ley es una ley integral que por una parte plantea acciones que procuren evitar los embarazos no deseados y por lo tanto, los abortos. Se establecen mecanismos para hacer llegar educación sexual a más gente, métodos anticonceptivos, y atención y cuidado a madres con embarazos no deseados que no quieran tomar el aborto como una alternativa, y ya sea que decidan quedarse con el bebé o darlo en adopción..." (Caray! Nunca se había hablado masivamente de esto...)

Al día de hoy, en el DF, ya existen 3 causales de aborto que no están penalizadas: Por malformación genética del producto, por amenaza de vida de la madre, o por violación... lo polémico de esta ley, es que se agrega una cuarta causal, que establece que si la madre ve truncado o afectado su proyecto de vida. Para algunos, esta causal podría resultar vanal, pero no lo es.

La función de ser madre, debe ser una actividad amorosa, entregada, y voluntaria. Y una mujer no debe ser obligada a formar, parir, criar y educar a un hijo, si no lo desea. Si no está dispuesta a compartir su cuerpo para el embarazo, o si este hijo, implica un cambio radical de vida en la que esté comprometido su bienestar, no debería ser obligada a tenerlo. La maternidad es un don que las mujeres deben tener la libertad de elegir o no. De aceptarlo o no.

En una maternidad causada por un error técnico (se rompe el condón, falla el método anticonceptivo, falla las cuentas, se mueve el DIU, etc), causada por una cuestión social (abuso sexual violento, ya sea por un extraño o por un marido macho, o por ignorancia, etc), o causada por la debilidad a la que todos estamos sujetos por nuestra condición humana, y que por ende trae un hijo no deseado, no debería verse a este hijo como "la consecuencia", de esta sexualidad. Un hijo nunca debe verse como "un castigo" o como "la responsabilidad" por una conducta sexual... Y creo que una madre debería tener el derecho de tener los hijos que ella decida, en el tiempo que lo decida y en la frecuencia que más le convenga.

Pero volvamos a la ley, que es el tema de este post.

La ley, y creo que la inmensa mayoría de los mexicanos, no estamos de acuerdo con el aborto. Ojalá cada vez sea menos recurrido y menos frecuente acudir a un aborto para suprimir un producto no deseado.

Pero hoy en día es una realidad, en la que con o sin ley, todos los días, mujeres de todo el país, deciden abortar o no. Apesar del miedo al pecado, deciden abortar o no. Y que, en todas las clases sociales, y de todos los grupos sociales, y de todas las creencias, salen mujeres que deciden abortar clandestinamente, unas, las que tienen acceso a más información y poder económico, lo harán en los consultorios de sus ginecólogos, y las más, lo harán en lugares insalubres, con enormes riesgos de infecciones, enfermedades y muertes causadas por instrumentos improvisados, sucios, y por manos de charlatanes.

La ley NO PROMUEVE el aborto. Sólo facilita una condicion para que quienes ya han tomado una personalísima decisión de suspender su embarazo, lo hagan, por lo menos, por instituciones y profesionales adecuados...

Si yo fuera un doctor de una institución pública, y tuviera en mi consultorio a una mujer que ha decidido abortar, es una excelente oportunidad para poder promover la educación sexual, explicar el uso de métodos anticonceptivos, y de prevención que si, en otras condiciones esa misma mujer aborta en un callejón, y sobrevive, está condenada a volver a cometer el mismo error por su propia ignorancia, y no tener la atención adecuada.

Mientras no sepamos con exactitud el número de abortos que se hacen cada día, no sabremos de qué tamaño es el problema o dónde hará falta redoblar los esfuerzos de las campañas en contra de los embarazos no deseados. Seguiremos propiciando costosos y riesgosos procedimientos clandestinos de abortos, y seguiremos haciéndonos de la vista gorda de un problema que es una causa de otro tipo de problemas sociales, de salud pública y económicos.

Ahora que he escuchado con más detalle las características de esta ley, creo, que la ley es moderna, moderada, integral, cuyo principal objetivo será el de promover la educación sexual, poner disposición de las mujeres información y antender a madres con embarazos no deseados en sus diferentes posibilidades de decisión: "abortar" o "no abortar".

Esta discución se ha centrado en la calificación o descalificación del aborto, pero debería centrarse en la aprobación o no de la ley y en los beneficios que esta ley podría traer para poder evitar en lo futuro, más y más embarazos no deseados.

Despues de la charla con mi amigo, cuando regresabamos a nuestros escritorios, le pedí que documentara sus comentarios en mi blog, y no lo ví con muchas intenciones de hacerlo... espero que al leer este larguísimo post, pueda motivarse a compartir con los otros 3 lectores del blog sus pensamientos al respecto.

miércoles, abril 11, 2007

Anoche, después de no se cuánto tiempo, estuve en el RojoCafé. En una mesa, sólo acompañado de un cigarrillo encendido y una cerveza helada, toqué la guitarra en manos de Ulloa, y canté, en su voz, temas clásicos de Silvio.

En el Rojo no pasa el tiempo; en el Rojo me transformo en quien fuí.

lunes, abril 09, 2007

Todavía puedo sentir la emoción de ver a mi hijo dar sus primeros pasos.

El viernes pasado, coincidiendo con su cumpleaños, Andrés caminó, por primera vez... Caminó con cautela, haciendo equilibrio con sus manos, y mirando, incrédulo con sus ojos grandes como platos, cómo daba un paso detrás de otro, tambaleante, sin ningún apoyo, sin que nadie le tomara de las manos. Sonreía, con una risita inmóvil, como si un movimiento de más en ese gesto, pudiera hacerlo perder el equilibrio.

Todo lo demás, será cuestión de práctica. Será cuestión de motivarlo a convertir esos cinco en diez pasos... luego veinte... cien...

Ahora que lo tengo lejos, y que no puedo ponerme de rodillas frente a él, pidiéndole que caminara hacia a mí, no tengo por hoy, otra alternativa que sólo recordar y volver a vivir esos primeros pasos de quien estoy seguro, será capaz de dar todos los que se proponga.

viernes, abril 06, 2007

Andrés celebró su cumpleaños número uno en compañía de sus familiares y amigos más cercanos. En la bonita recepción, Andrés lució sus primeros pasos.

Andrés posa junto con su pastel de cumpleaños adornado por una figura de "El Principito".
Lina abraza a Andrés.

Andrés revisa con cuidado los detalles de uno de sus regalos.

De izquierda a derecha:
Alex, Marduk Jr., Marduk y Andrés.



martes, abril 03, 2007

Ya lo dice el viejo y conocido refrán: "Para conocer a Andrés, vive con él un mes".

Nada más cierto... Es complicado decirle a la gente cómo es una persona. Aunque la conozcas... pero cuando se trata de un bebé en la víspera de su primer año, se vuelve doblemente difícil... de cualquier manera, intentaré describir cómo es mi hijo.

Le gusta golpearlo todo. Todo cuanto puede golpear, ya está ahí, dándole manotazos. Le dedica especial atención a todos esos objetos que hacen más ruido.

Los garrafones, las puertas, la mesa, mi cara... como parte de la experimentación, el tacto, así en un uso violento, es su método favorito para conocer las cosas; por cómo suenan, por cómo se sienten, o por si se quejan de la sorpresa del manotazo.

Andrés apenas está por cumplir un año y ya tiene sus propias filias... golpear, como decía, es una... presionar botones, otra que tiene desde hace ya varios meses. Apenas descubrió que presionar un botón estaba ligado a una reacción, Andrés se ha convertido en un "presionadordebotonescompulsivo", si es que eso existe. Pero no puede tener un botón a su alcance, sin que pueda contener las ganas de intentar presionarlo... lo hace todo el tiempo: Con el control remoto, por ejemplo, y muestra una sonrisa maquiavélica cuando no nos lo esperamos y le cambia de canal justo en la parte más emocionante de la película... o presiona el botón de encendido del televisor, cuando logramos poner el control remoto fuera de su alcance, puede apagarlo/prenderlo reiteradamente hasta que uno de nosotros hace un gesto de desapruebo.

Con el radio, ya aprendió a prenderlo ya apagarlo a su antojo. A ponerle "play", "stop", "am", "fm"... El switch de la luz que es fácilmente alcanzable desde su cuna... Y los botones, y palancas del coche... parece que Andrés nació con un chip renovado que le hace entender cómo ejecutar comandos sólo presionando un botón.

Hablando de coches, su berrinche más memorable, fue, cuando, viajando en las piernas de su mamá, en el asiento de copiloto, se le ocurrió tomar el volante. La necedad ha sido otra de sus más grandes virtudes. Gritó, y pataleó a tal grado que seguramente la gente que lo veía desde la calle, pudo imaginar que sus deditos se habían atrapado al cerrarse la puerta.

Cuando no lo soportaba más, y cuando la calle era derecha, sin curvas, lo puse en mis piernas, y sus manos tomaron el control del volante... Milagrosamente en un instante, su carita se volvió sonriente y llena de satisfacción. Error. Ahora cada que se sube al coche, quiere ir manejando.

Le gusta meterse en cajas, tinas o cualquier hueco donde pueda sentarse. Y si la caja, o el bote, es demasiado pequeño para él, le gusta meter cosas... espero que conserve esa habilidad, para cuando podamos ordenarle guardar sus juguetes en su lugar.

Además comienza a definirse su refinado gusto musical. Ni toda la música alternativa que le gusta a su padre, fué de su agrado... ni la extensa colección de música latina a la que tiene acceso en nuestro librero, fué suficiente, ni toda esa música instrumental que Lina procuró para arrullarlo incluso desde antes de su nacimiento causó resultado. A Andrés le gusta Costel.

A una determinada hora del día, no recuerdo cuál, mientras no estamos, obviamente, con la complicidad de su nana, prenden el televisor y ven ese programa donde un payaso canta música grupera. Sí, un payaso, con todas sus letras, canta música grupera, tambien con todas sus letras.

A mi hijo le ha tomado menos de un año ir formando su personalidad... y a veces, cuando hago proyecciones al futuro, divago en cómo será en los próximos 15 años... la mayoría de las veces, me gusta lo que imagino... otras, lo confieso, termino aterrado.

lunes, abril 02, 2007

Esta semana, Andrés cumplirá su primer año de edad.

Todavía no ha aprendido a decir una palabra en español, pero ha logrado definir códigos que le permiten mantenerse comunicado: Sabemos cuando quiere comer, cuando quiere leche en lugar de té, cuando tiene sueño, y con su pequeño -y ya muy hábil- dedo índice, es capaz de señalar, combinado con una miradita suplicante, cualquier objeto que quiere alcanzar... de esta manera, sus necesidades primarias, como el alimento, el sueño, el cambio de pañal, y su juego, están cubiertas perfectamente con los muy pocos sonidos que hace, con su sonrisa, con su llanto y con sus miraditas que se han vuelto muy expresivas.

Tampoco ha aprendido a caminar erguido. Bueno, camina, pero necesita usar un apoyo: una pared, por ejemplo, aunque prefiere que lo tomen de una mano para caminar. Podría girar indefinidamente alrededor de una mesa de centro, o de una silla, siempre apoyándose en el mueble... podría caminar por horas, siempre apoyándose en algo o alguien para conservar el equilibrio... y por más práctica que ha tenido, todavía no se siente confiado para dar su primer gran paso.

Lamentablemente, tampoco tiene la necesidad de hacerlo. Cuando decide trasladarse a un lugar, y nadie lo tiene de la mano, o no hay un mueble o pared en qué apoyarse para llegar al destino deseado, no tiene mayor problema de valerse de sus propios recursos: Se da un sentón, a sabiendas que su pañal amortiguará el golpe, y en dos hábiles movimientos está ya en posición, para gatear a toda velocidad. Aunque se nota que tiene un interés muy noble por aprender a caminar, tambien es evidente que eso no le impide hacer "lo que tenga que hacer".

Es nuestro primer hijo, es el primer nieto. Todos lo adoramos, y tiene una sonrisa tan encantadora que quien lo conoce, sin darse cuenta, comienza a quererlo tambien, pero por más dulce y tierno que sea, cuando se empeña en hacer algo que nosotros -la autoridad- no queremos que haga, su encanto, simplemente se evapora y su carita risueña se convierte en un berrinche incontrolable.

Arquea su espalda, dando un brinco hacia atrás, poniendo en riesgo su propia integridad física. Grita y llora desconsoladamente y ni toda la paciencia del mundo puede evitar en pensar en darle unas nalgadas. Y Andrés bien que lo sabe. Tan pronto nota que su actuación, por más dramática y creíble que le hubiera salido, no tuvo éxito, y su capricho no se ha cumplido, y además, sus padres ya no lo están mirando con ternura, regresa, otra vez, a ser el niño encantador que había sido minutos antes...

Esta semana, Andrés cumple su primer año con nosotros. Estoy seguro que ha aprendido muchas cosas, gracias a nosotros o gracias al mundo que le rodea, pero sin duda, quien más ha aprendido este año es Lina, que, hace un año exactamente, todavía no tenía claro cómo cambiar un pañal, tampoco sabía cómo se preparaba la fórmula del alimento del bebé, no tenía claro cómo cuidarlo, cuánto tenía que dormir, cómo arrullarlo o cómo aliviar una rosadura del pañal.

Hace un año, apesar del enorme bulto que cargaba en su abdómen, y apesar de que éste se movía por sí mismo, y en esas fechas, ya no la dejaba dormir, Lina no tenía ni una idea de lo que implicaba ser madre, y de cómo su vida cambiaría el día del parto, y tuviera, por primera vez en su vida, a su propio hijo en brazos y dependiendo de ella, la vida de esa indefensa criatura.

De ese primer día a casi un año de distancia, Lina ha despertado en las madrugadas para alimentarlo, ha consolado su llanto y su dolor, lo ha bañado y ha cambiado a veces hasta 5 veces al día sus pañales sucios... le ha lavado su ropita con esmero, ha dejado de ser ella, para convertirse en una madre amorosa y dedicada.

El que hoy, Andrés goce de una cabal salud, de que esté regordete y que tenga esos cachetes rosados tan chistosos, y que ría tan libremente, se lo debemos sin duda a los cariños y cuidados de su madre.

El próximo fín de semana celebraremos el primer aniversario de Andrés... pero si hay alguien quien deba recibir el homenaje ese día, es su amorosa madre, mi querida Lina.