jueves, julio 03, 2008

La delincuencia no puede ser combatida con armas.

En los últimos 15 años, el país ha registrado records en exportación ilegal de mano de obra a Estados Unidos. Nunca antes en la historia, había habido tanta migración. Las oportunidades para los que más las necesitan no pueden esperar. Unos tienen que buscarlas en otros países y otros, de manera ilegal en el propio. Es una hipótesis simplista, lo sé, pero a grandes rasgos es como me explico esta creciente ola de violencia y migración ilegal, como parte de una misma falla de origen: Falta de oportunidades y un estancamiento económico crónico en nuestro país.

En días pasados, el secretario de gobernación, hizo, a modo de informe, un discurso en el que enlista con "cifras concretas", todos los golpes que el gobierno le ha dado a las organizaciones criminales en nuestro país. Toneladas y toneladas de droga decomizada, armas, dineros y la captura de cabecillas de dichas mafias.

Apesar de ello. No tenemos idea de qué tamaño es la rebanada que le estamos quitando al pastel de la delincuencia organizada. El otro día que comentaba este asunto, se me ocurrió utilizar como analogía un estanque con peces. Si los peces en el estanque son pocos, meter una red, y sacar algunos pescados, implicará tener mucha suerte... Sin embargo, cuando la pecera está llena, una red saldría rebosante de pescados... y no necesariamente sería gracias a la habilidad del pescador, y lo que se saque, aunque mucho para los ojos del pescador, podría ser una cantidad poco significativa para lo que sigue en la pecera.

Con una evidente falta de infraestructura y armamento, con una desorganización vista a todas luces, con miembros poco capacitados, las policías federales y el ejército han logrado dar esos golpes que ahora se cuelga Mouriño como medallas... Pero según expertos, el precio de mercado de la droga no ha cambiado. Las operaciones ilícitas parecieran seguir operando normalmente. Se reemplazan a los capturados o a los ejecutados y estas organizaciones continúan sus funciones.

Eso no quiere decir que yo piense que el ejército sea indiferente para ellos. Debe ser muy molesto y en ocasiones inoportuno. Pero creo que no les causa mayor temor. Entre mafias debe haber mayor respeto y luchas más encarnizadas, como se ve periódicamente en cuerpos sin cabezas y "tiros de gracia".

Sin embargo, y no por esta falta de capacidad, yo creo que no es la forma como se debe combatir al crimen organizado -y al crimen en baja escala-, sino con mejores acciones políticas y económicas que puedan generar los empleos y las oportunidades que se les ha negado a la inmensa mayoría de los mexicanos... Coincide que en estos mismos años en que se ha acrecentado la violencia, las 39 familias más ricas de México se han visto descaradamente beneficiadas... Cualquiera podría pensar que las oportunidades sólo se han dado en una sola dirección.

Hablando de cuerpos policiacos mal entrenados y operativos mal ejecutados, ahí tenemos al caso del NewsDivine. Terrible situación. ¡Todavía no me puedo imaginar cómo es posible que no se hayan dado cuenta esos policías que estaban en la puerta cómo se les iban muriendo uno por uno esas 12 personas! ¡Qué falta de sensibilidad! ¡Qué falta de sentido común! Pero esos empleados uniformados son brutos. Si no les ordenan que se quiten, no se quitan. Y supongo que esa es la razón por la que Guillermo Zayas, quien estaba al mando de ese operativo fatal, ahora está en proceso penal. Debió dar la orden de retirada.

Despues de sesenta y tantos operativos de este tipo, uno salió mal. Unos piden la cabeza de Marcelo, más que en un afán justiciero, en un afán de quitar candidateables del camino... Otros le reclaman a Marcelo la cabeza de Ortega. Pero no saben que la cabeza de Ortega sólo la quita, la pone o la perdona Calderón. Sí. De alguna manera, Ortega es un puesto que pone el Calderón. Así que si alguien debería despedirlo, si alguien se tiene que ensuciar las manos, es precisamente Felipe.

Sé que el caso no es para nada insignificante. Es terrible. Pero es una tragedia a la que se le saca más raja política de la que se le puede encontrar. Todos los medios, electrónicos e impresos no dejan de hablar de eso, y sin respeto a las verdaderas víctimas, sólo intentan quitarle piezas al oponente en este partido de ajedrez que ha comenzado. No sé qué es más terrible. Lo que sí es verdaderamente indignante es que no siquiera los deudos están tan hambientos de cabezas... eso lo dice la encuesta que realizó María de las Heras.

También hace días me encontré un cartón en El Universal:


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