viernes, junio 19, 2009

¿Por quién votaría en Iztapalapa?

En post's anteriores, he manifestado que mis votos en esta elección serán en blanco. Además de pensar que el sistema político es insostenible, los candidatos que participan en la elección que corresponde a mi distrito dan pena ajena. Votar por "uno menos malo", es contribuir a la mediocridad del sistema partidista; premiando a uno, no por ser "bueno", sino por la espléndida cualidad de no provocar asco. Así no juego.

Pero recientemente los medios han volcado su atención -y la nuestra- al asunto éste de AMLO en Iztapalapa.

He oído de todo. Los medios al unísono recitan el mismo discurso. Escandalizados. Y no sé qué me extraña más, si oir a los querubines anunciando el fin del mundo, o que todos estos periodistas no se hayan dado cuenta que así es la política. (Unos desde lo oscurito, y otros en un templete).

Yo digo que todas esas voces se unen y levantan la voz y lo gritan a los cuatro vientos, por la simple razón de que saben que el PT -Juanito, Brugada, AMLO- pueden ganar esas elecciones. Porque a pesar de haber dicho hasta el cansancio estos últimos años que AMLO está en la lona, saben que si gana esta elección en particular, se va a levantar. No escatiman, porque saben que AMLO no ha perdido su fortaleza. Si de verdad creyeran todo lo que decían de que ya está sólo, simplemente lo ignorarían.

Yo veo la cosa muy simple: Que gane la elección popular. En eso debemos estar todos de acuerdo.

Brugada compitió por la candidatura y miles de ciudadanos votaron por ella. Tantos, que hasta pensaron que había ganado la elección interna. No discutamos si la tipa es buena o "menos mala", sólo asumamos que mucha gente piensa que ella es la que los debe gobernar.

Luego, por una disposición "oficial", se decidió que Oliva será la candidata. ¿Qué debería hacer toda la gente que votó por Brugada? ¿Resignarse y votar por el partido sin importar quién sea el candidato?

Andrés Manuel, desde una posición cuestionable, por supuesto, acordó -cohersionó, presionó, como se le quiera llamar- con el candidato del PT -que dicho sea de paso NO TENIA POSIBILIDADES DE GANAR- que toda la gente que quiera a Brugada como delegada votará por él, sólo para que, sin comenter ninguna desviación legal, la gente de Iztapalapa tenga como delegada a la candidata que la mayoría quiera.

Para eso son las elecciones. Para eso son las campañas. Y AMLO, con todo y su cuestionable método, está poniendo a disposición de los ciudadanos la posibilidad de conservar a su candidata.

Es simple, digo, porque si los votantes no quieren a Brugada, no votarán por el PT. Que la gente vote por la opción que quieran. Con el evento del martes pasado, quedó claro -para todos- que existe la posibilidad de tener a una delegada determinada, siguiendo un procedimiento poco ordinario. ¿Qué tiene de cuestionable esto? ¿Los aires dictatoriales de AMLO? ¿Sus rasgos autoritarios? Quien no esté de acuerdo, que no le siga la corriente. Punto. Pero si la mayoría le cree y está de acuerdo con esa opción, que vote y lo diga en las urnas. Por lo pronto, el que un candidato ceda su candidatura a otra persona no es nada nuevo, pero ahora se tiene que hacer así porque los tiempos para haberle cedido el puesto -formalmente- ya habían pasado. (No se le puede cuestionar al "mesías tropical" que esté violando alguna ley, o pisoteando alguna institución.

Si ganara esa fórmula, habrá evidencia para poder justificar ante la Asamblea y ante el jefe de gobierno, cuál ha sido la voluntad popular. Despues de todo, de eso se trata.

Se enfrentarán entonces en las urnas Oliva y Brugada nuevamente, y ante ésto, sólo se escuchará la voz del pueblo de Iztapalapa. Que gane la que tenga más votos. (Como en cualquier elección)

Tampoco soy ingenuo, y sé que detrás de toda esta maraña hay un interés personal de AMLO de juntar votos, preparándose abiertamente para la próxima elección presidencial. ¿Tiene eso algo de malo? ¿Acaso es el único con ese legítimo interés? ¿Acaso se piensa que es el único que está moviendo sus "fichas" con tan claro objetivo? No lo creo. Pero en él todas estas cosas serán mal vistas por que sabemos -todos- que las posibilidades de amenazar en las próximas elecciones son muy altas. Y le tienen miedo. Y desde ahora, se comenzará a meter sancadilla en la más mínima oportunidad. Así es la política en este país.

¿Que si es autoritario? ¿Que si está enfermo de poder? ¿Que si es un peligro para México y lo que hace y dice es más que evidencia? Dejémos que sea la gente quien lo decida.

Como si todos los demás políticos fueran unas peritas en dulce.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Yo entiendo el concepto de "menos malo" así: en una calificación del 0 al 100 a los políticos de este país la mayoría estarán en 0 ó 0.01; tal vez un ciento alrededor de 0.50 y máximo una decena cerca del 1; ojalá que la anulación del voto los estimule a toooodos por parejo para mejorar su calificación. En otro punto te comento que AMLO no hubiera tenido necesidad de hacer tal pancho si se permitieran las candidaturas independientes: Brugada juega como independiente y aquí no pasó nada. Por último, busqué el verbo "cohersionar" en el diccionario y no lo encontré, tal vez quisiste aplicar el verbo "coaccionar" opino yo...